LA NUBE

Vivimos en un mundo más conectado y más cambiante que nunca antes.
Nuevas empresas pequeñas superan a los operadores tradicionales establecidos
para acabar dominando sus mercados cada vez más rápido. Los países en desarrollo ponen a un lado las inversiones masivas en comunicaciones fijas y se concentran directamente en las comunicaciones móviles. Si bien nuestra creciente interconexión conlleva muchos beneficios, también implica una mayor vulnerabilidad y una mayor sensibilidad al riesgo. Cada vez más, nos servimos de la tecnología como apoyo en nuestras vidas personales y profesionales. Como individuos, exigimos un acceso instantáneo y siempre disponible a las comunicaciones, datos, contenidos y aplicaciones. Usamos cada vez más los medios de comunicación social para informarnos antes de tomar nuestras decisiones personales y empresariales. Como líderes empresariales, esperamos que la tecnología nos brinde eficacia en cuanto a los costes, mejore la experiencia del cliente, impulse el crecimiento de los ingresos y fomente la innovación. Al mismo tiempo, exigimos una disponibilidad constante y seguridad de extremo a extremo.

Esta combinación de expectativas crecientes y la rápida velocidad de los cambios supone un reto para los enfoques tradicionales de la tecnología informática. La duración de los ciclos económicos se reduce constantemente, pero la complejidad del sistema empresarial continúa su escalada. La tecnología informática se describe a menudo como un acelerador de la empresa, pero también como un obstáculo para los negocios. Se necesita un nuevo enfoque para liberar a los individuos y a las organizaciones de las limitaciones de la tecnología informática tradicional. Creemos que la nube es parte de la respuesta y desempeñará un papel central en la próxima era de la TI.

La nube es un nuevo paradigma de cómputo. En la nube, los recursos y servicios de TI se abstraen de la infraestructura subyacente y se suministran a demanda y a escala en un entorno multi-tenant. La nube tiene varias características

• La tecnología informática, desde la infraestructura a las aplicaciones, se entrega y se consume como servicio en la red
• Los servicios operan de forma coherente, con independencia de los sistemas subyacentes
• La capacidad y el rendimiento se amplían para satisfacer la demanda, con facturación según el uso
• Los servicios se comparten a través de múltiples organizaciones, lo que permite
• que los mismos sistemas subyacentes y aplicaciones satisfagan las demandas
• de distintos grupos de interés, a la vez y de forma segura
• Se puede acceder a las aplicaciones, servicios y datos mediante una amplia gama de dispositivos conectados (por ejemplo, teléfonos inteligentes, ordenadores portátiles y otros dispositivos de Internet móvil)

La nube incluye algunas variaciones de modelos de servicios (es decir, IaaS, PaaS y SaaS) y modelos de implementación (es decir, nubes privadas, públicas, híbridas y de comunidad), tal y como se definen en la barra lateral.